Una buena manera de acercar a los más pequeños a actividades físicas recreativas es enseñarles desde casa a jugar a "juegos populares". Estos juegos son los que hace años se jugaba en las calles. Estos juegos como son "El escondite", "el bote", "policias y ladrones", canicas...y una infinidad de juegos que varían según la zona donde vivamos. Hoy en día es muy difícil, pues la mayoría de la población vive en ciudades y no es como hace unos años que se podía jugar en la calle sin ningún tipo de problema.
Una buena alternativa es llevarlos al parque y allí enseñarles a jugar. Estos juegos son muy divertidos, y lo mejor de todo es que si los practican fuera de la escuela se abrirán a otros niños que no sean de su colegio, aumentando así su espacio en el que relacionarse. Va más allá de divertirse a través del juego y la actividad física, es crear nuevas relaciones y nuevos amigos que posiblemente conservarán en un futuro.
Estoy de acuerdo con lo comentado en este post, los juegos a los que solíamos dedicar nuestra juventud están desapareciendo cada vez más por los videojuegos, creando carencias importantes de habilidades sociales en los más jóvenes. Los niños están deseando pasar tiempo con sus familiares y unos buenos "profesores" de juegos tradicionales podrían ser sus abuelos. Por experiencia, he visto a un hombre mayor enseñar en un parque un juego de su infancia a su nieta y, en seguida, el resto del niños del parque se acercaron interesados en aprender y participar en esta actividad, dejando de lado sus videojuegos de fútbol. Sería interesante que no se perdiera este gran tesoro que son los juegos tradicionales.
ResponderEliminarEscrito por: Juan Carlos Flores Ferrándiz